SAN ADRIAN DE ARGIÑETA

 
 
Toda ella se encuentra rodeada perimetralmente por un pórtico sostenido por
postes de madera apoyados en basas de piedra. El enlosado sólo se interrumpe en
el acceso meridional, donde es sustituido por canto rodado dispuesto en formas
geométricas
 
Frente a su fachada meridional, se halla dispuesta una veintena de sepulcros
antropomorfos, algunos trasladados de otras ermitas a mediados del siglo XIX,
que comparten espacio con estelas discoideas.  El conjunto sepulcral ha sido
objeto de numerosos estudios, cifrándose su cronología en finales del siglo IX.
 
  El conjunto de Argiñeta fué declarado primer Conjunto Artístico de Bizkaia en
1964 y se encuentra catalogado entre los Monumentos Nacionales de Euskadi.El
acceso principal es por la puerta este, en arco carpanel , con otra adintelada
en la fachada sur, junto a una mesa de piedra adosada a la pared y una
inscripción en la piedra que reza "AÑO 1666"
Su interior presenta pavimento de canto rodado  y el altar corresponde a un
sepulcro que procede de la ermita de San Esteban .
La imagen del santo  preside la estancia y su festividad se celebra el primer
sábado de Agosto, cuando la Cofradía homónima se reúne para merendar y cenar.
Fue restaurada en 1982, siendo el promotor y artífice de la misma el sacerdote
local D. Félix Gallastegi.
 
 
De Argiñeta y sus sepulcros
Junto a la er mita de San Adrián, y orientado al sur, un total de 26 sepulcros monolíticos de piedra  arenisca  con  sus correspondientes cubiertas labradas se disponen en forma de "U" con dos estelas circulares a su entrada y tres  más. dos circulares  y una triangular en el lado opuesto. Tras el lado menor  del recinto así confor mado, una tapa semienterrada da la impresión  de que no ha sido incorporada por  falta  del cuerpo inferior.
Cada  sepulcro. monolítico,  se  encuentra vaciado para alojar  en él un cuerpo humano. Sobre el bloque se  asienta  una cubierta  de sección triangular basada en un pequeño  rectángulo. El vaciado  destinado  a alojar el cadaver  es, en  ocasiones, antropomorfo: se  aprecia a la perfección el alojamiento de la cabeza, que se ensancha a la altura de  los hombros para estrecharse  progresivamente a  medida que nos acercamos a  los pies. El  mismo sistema  de alojamiento lo  apreciamos  en  las sepulturas  existentes en Andra Mari de Gazeta, Santo  Tomas de Mendraka y San Bartolomé de Miota.
El primer sepulcro de la línea izquierda es doble: consta de  un solo bloque de piedra con alojamientos separados para  dos cuerpos, el uno junto al otro.  Sus cubiertas, sin embargo,  son  individuales.
Sólo dos de las cubiertas presentan  inscripciones, en latin. Así, el tercero de la izquierda, en lectura  casi unánimement e asentida, dice:
 
        Sepulcro  de Momo
 
 "IN  DEI NOMINE MOMUS IN CORPORE BIBENTEM FECIT IN ERA  DCCCCXXI IC DORMIT".
La cronología datada según la era, sistema habitual hasta  el Siglo XIV,  corresponde al año 893 del calendario actual.
El inmediatamente  anterior al citado  contiene  también inscripción latina, aunque su lectura difiere notablemente entre los que han intentado interpretar. Para unos diría "OBIIT EMILS GILBATERI AX DEI DCIS AUSTAS",   seguido por la inscripcion "Ω.A" a su derecha.  Para otros , se leería como " NARIATES DE IBATER XVII KALENDAS AUGUSTIERA DCDXXI" o incluso "ERA DCDXXI DI OBIIT  FMS   DI BATERIA  XVII KLDS AGUSTAS".  Lo que sin ninguna duda se lee perfecta mente    es el OBIIT inicial e inmediatamente  debajo, un anagrama cruz  de  cuyo  brazo izquierdo pende una omega invertida ,“ω”,  y una  alfa “A” del derecho. “
Y  no  existen más inscripciones que  las citadas: ni   rastro  de un tercer sepulcro del que algunos escriben, sin duda   basándose  en referencias tomadas de terceros pero que en  ningún  caso aparece en Argiñeta. Posiblemente se trate de esas lecturas diferentes que se han hecho de la inscripción de la segunda tumba
Que interpretación cabe de ello? . Atendiendo a la  primera   de  las inscripciones, parece  fuera  de duda se  trate de  un   enterramiento cristiano, tanto por su alusión a Dios como por la formulación  final de la muerte como sueño.  El anagrama  de  la segunda  tumba  parece ser el símbolo habitual  del cristianis mo  para mostrar su oposición al arrianis mo, la usual Alfa y  Omega,  aunque las letras estén invertidas.
Claro que, entonces, se plantea otra cuestión: por qué   mostrar  su oposición al arrianismo si hacía ya más de 300  años  que el Concilio III de Toledo había proclamado  al  Cristianismo como religión oficial de los Visigodos?.  Quiere eso insinuar que en el siglo IX había arrianos y cristianos en Bizkaia?  O se trataría de una costu mbre que habiendo tenido razón en su momento en  el Pais Vasco o fuera de él, tanto da, se había perpetuado luego como  símbolo de cristianismo si mplemente?.O, lo que es  igualmente sugerente, se introduce el Alfa y Omega junto con los primeros cristianos vascos?.
Pero hay otra interrogante: se trata de una necrópolis o no? A  juzgar por  la documentación y los testimonios  orales   transmitidos de boca en boca,  Argiñeta no era una  necrópolis: pero campañas recientes de excavaciones han sacado a la luz enterramientos en la ladera al este de la er mita y restos de posible asenta mi ento en la opuesta; sin embargo, los sepulcros monolíticos hoy existentes fueron apareciendo en  los alrededores de la er mita, los últi mos todavía hacia 1.947, y algunos ancianos del lugar recordaban haber oido de su traslado desde otras er mitas a mediados del siglo XIX, por el sacerdote Domingo de Retolaza y organizados en su disposición actual. En  otras  ermitas existen también sepulcros similares, si bien en cantidades simbólicas , como en San Bartolomé de Miota, Santo Tomás de Mendraka o Andra Mari de Gazeta.
Otras cuestiones se nos plantean también. A través de una  campaña de excavaciones que quien esto escr ibe emprendió, junto a Fernando Lazkano,  en 1.968,  en Mendraka, aparecieron  enterramientos en las proximidades de la   er mita  de Santo Tomás.  Pero todos ellos pertenecían al tipo de   enterramiento denominado de "cista", compuesto cada uno de lajas de  pizarra yustapuestas verticalmente, y una losa  de contorno triangular como cubierta.  En la cabecera, una piedra toscamente triangular y  clavada  en  vertical recordaba   las   estelas funerarias.    Y  algo similar ocurrió con las excavaciones que se llevaron a cabo desde 1984 en la er mita  de Santa Cruz, en  Memaia.
Casi con toda seguridad, el trabajo de  tallado y vaciado de las tumbas supondría, lejos de denotar un sistema habitual de enterramient o en el siglo , pensar  que tumbas como las de Argiñeta y similares de Elorrio fueran excepcionales: o, lo que es lo mis mo, que sus destinatarios lo fueran.  Quienes fueron enterrados en ellos? Quien sería el tal Momo?.
Porque  la cuestión no termina aquí.  Junto a las  tumbas aparecen cinco  estelas: cuatro  discoideas y una  triangular, clavadas en tierra a la cabecera de otros tantos sepulcros.
 
Estelas de Argiñeta
Y a   juzgar por lo hallado en la citada campaña de 1.968 en Mendraka,   las de  Argiñeta  debieron de hallarse también  junto  a  sendos enterramientos y fueron luego trasladadas aquí.
Dando entrada al recinto,  la de la izquierda , de 190 cms.  de altura total y 70 cms. de diametro en el disco.  muestra en su anverso  un motivo circular con una cruz incisa en  su  interior ,rodeado  todo por una línea quebrada a manera de orla.  La de  la derecha,  aunque de altura inferior, mide 80 cms. de diámetro y su disco  aparece dividido por cuatro líneas paralelas: entre las dos superiores  son perfecta ment e visibles motivos geométricos triangulares. En ambos casos, el reverso no muestra señal alguna.
Las tres  estelas restantes ocupan el  centro  del lado   menor del recinto.  La de la izquierda, la menor de las tres, es triangular  y tiene grabados cinco círculos menores y otras  diez   incisiones a  manera de círculos inconclusos.  La  central, con disco de 80 cms., aparece orlada de tres círculos concéntricos  que rodean  un  círculo  central menor del que parten ocho  brazos a manera  de radios, terminado cada uno de ellos por otro  círculo men or, mientras la base muestra motivos geométricos entrelazados en forma de X. Su reverso muestra una circunferencia rematada por una   incisión  recta  hasta  el suelo,  con   otra   interior, concéntrica.  Finalmente, la  de  la  derecha es menor  que  las   restantes: su decoración consiste en un círculo central con ocho brazos  radiales  y otros tantos círculos menores en  su  extremo exterior.  Dos incisiones circulares la orlan por los  borde
Tumbas: doble o sencillas; sepulcros: con y sin  inscripciones; estelas: triangular o circulares.  Argiñeta es un  paso atrás en nuestra historia, una reflexión  sobre  la mu erte, una búsqueda de las raices religiosas de nuestro pueblo.
Sea   como  fuere,  ahí están: tumbas, estelas e inscripciones, para reflexión de los estudiosos y para aportar, si cabe, alguna luz  a  los problemas del poblamiento  de  nuestra  tierra y de su cristianización.
 
San Adrián de Argiñeta